miércoles, 12 de mayo de 2010

La dirección del Liceo coruñes podría ser juzgada por el ahogamiento de Diego Novo en Abril de 2009


Fuente: La Opinión, de A Coruña
La magistrada del Juzgado de Instrucción número 3 insiste en que la monitora y el socorrista de la piscina del colegio Liceo la Paz deben ser los únicos imputados por la muerte de Diego Novo, el niño de cuatro años que falleció ahogado en el centro en marzo de 2009. La juez desestimó el recurso que presentó el abogado de la familia del menor, José Luis Gutiérrez Aranguren, para exigir la imputación del director, el jefe de estudios y los propietarios del centro. El letrado, no obstante, recurrirá a la Audiencia Provincial porque asegura que la juez que investigó el caso no respondió a sus alegaciones y ni dio "una respuesta razonada" para conocer "el por qué de su criterio judicial".


"Aquellos que ostentan el cargo de mayor estatus no se limitan a marcar los horarios o hacer el cuadro de vacaciones entre monitores, sino que tienen una incuestionable función de vigilancia sobre el cumplimiento de la seguridad de las personas cuya custodia les viene atribuida precisamente por razón de ese estatus, en este caso niños de tres y cuatro años de edad de cuya integridad e indemnidad son los máximos responsables", subraya el abogado de la familia del menor en el escrito que presentó contra el auto de procesamiento de la juez en el que sólo imputó como posibles responsables de un delito de homicidio por imprudencia a la monitora y al socorrista de la piscina.

Aranguren denuncia que los responsables del colegio no tienen "el menor control sobre cómo se desarrollan las clases de natación" y asegura que han incurrido en numerosas "contradicciones" durante las declaraciones que prestaron como testigos. El abogado insiste en que los directivos del centro deben de ser imputados al igual que lo son los empresarios cuando hay un accidente laboral.

"El fallecimiento del menor ha sido consecuencia de una concatenación de múltiples y gravísimas negligencias de las que han de responder no sólo las personas que se encontraban directamente a cargo del grupo de niños al que Diego pertenecía, sino también aquellas otras que de una y otra manera han omitido los más elementales deberes de cuidado y vigilancia", recalca Aranguren en el recurso que presentó ante el Juzgado de Instrucción número 3 y que la magistrada desestimó. El abogado utilizará los mismos argumentos para convencer a la Audiencia de las negligencias que en opinión de la familia cometieron los directivos del colegio.

La magistrada que investigó la muerte del menor se negó a imputar a los responsables del Liceo porque sostiene que el "deber del cuidado" con el que se ha sido negligente es "un deber que recae sobre personas muy concretas". La juez, además, calificó de "improcedentes" las peticiones del letrado de la familia de Diego Novo. "Las personas bajo cuya vigilancia se desarrolla la clase de natación de este grupo y bajo cuya supervisión se hallan los menores en el recinto de la piscina son la monitora y el socorrista", destacó la magistrada en su auto de procesamiento.

La juez dio así por concluida la investigación sobre la muerte del niño. La Audiencia Provincial tiene ahora la última palabra para decidir si el director, el jefe de estudios y los propietarios del centro deben sentarse en el banquillo de los acusados junto a la monitora y al socorrista.

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